Mensaje del día – 10 de diciembre de 2018
Mensaje de la Pizarra de Prashanti Nilayam
OM SRI SAI RAM
Hay una gran diferencia entre la India de hace cinco siglos, y la India actual, en el campo del control de los sentidos. Hoy en día, no se controla a los sentidos; todo ser humano es esclavo de la codicia, la lujuria y el egoísmo. La culpa es totalmente de los padres y de los mayores. Cuando los niños van a los templos o a escuchar discursos religiosos, los reprenden y les advierten que es una señal de desequilibrio mental. Les dicen que la religión es una búsqueda propia de la vejez y que ¡no debe ser tomada en serio por los jóvenes! Pero, si ustedes alientan a los niños, ellos pueden equiparse mejor para la batalla de la vida. Todos los padres deben aconsejar a sus hijos: «Estén convencidos de que Dios está guiándonos y protegiéndonos. Recuérdenlo con gratitud. Récenle para que los vuelva puros. Amen a todos, sirvan a todos. Únanse a
buenas compañías. Visiten templos y hombres santos». Luchen contra las tentaciones de los sentidos, conquisten los enemigos internos y triunfen sobre su ego. ¡Esa es la verdadera victoria que merece ser celebrada! (Discurso Divino del 1 de enero de 1967)
There is a vast difference between India five centuries ago, and India today, in the field of sense control. Today senses are allowed free play; every human being is a slave to greed, lust and egoism. The fault lies entirely with parents and elders. When children go to temples or religious discourses, they reprimand them and warn them that it is a sign of insanity. They tell them that religion is an old-age pursuit; it should not be taken seriously by youngsters! But, if only you encourage the children, they can equip themselves better for the battle of life. Every parent ought to advise their children: «Be convinced that there is God, guiding and guarding us. Remember Him with gratitude. Pray to Him to render you pure. Love all, serve all. Join good company. Visit temples and holy men.» Campaign against the temptations of the senses, conquer inner foes and triumph over your ego. That is the true victory that deserves celebration! (Divine Discourse,
Jan 1, 1967)— BABA